top of page
Margarita Dittborn.jpeg

MARGARITA DITTBORN

Chile

Hago fotografía como una forma de pintar sin tener que hacerlo. No es que sepa pintar y no quiera hacerlo: es que no tengo la paciencia para aprender. Mi ansiedad por el resultado rápido me llevó a concentrar en la fotografía todo aquello que quiero realizar. Sin embargo, me gusta tanto la pintura que mi obra está muy relacionada con su historia, más específicamente con el barroco, cuya estética recojo y, junto con un imaginario propio, extraído de mi cultura y gracias a la tecnología digital, configuro nuevas composiciones.
 

Margarita Dittborn Valle nace en Santiago de Chile en 1981. Si bien realizó estudios de fotografía en el Instituto Profesional ARCOS, Santiago de Chile (2000-2002), así como otros cursos y talleres en el Instituto Profesional ARCOS, Santiago de Chile (1999) y en el Instituto Bob Borowicz, Santiago de Chile, un Taller de fotografía en blanco y negro a cargo de la fotógrafa María Paz Mellado (1997), se considera una fotógrafa y artista visual autodidacta.


Fue reconocida entre los 500 mejores artistas jóvenes del mundo según The New Museum de Nueva York y el libro que acompañó la trienal del museo, “Younger than Jesus,” publicado por Phaidon en el 2009.


Ese mismo año, recibió el Premio del Círculo de Críticos de Chile a la mejor Exposición de Fotografía chilena con la muestra “Enfermas de Amor” presentada en Galería Florencia Loewenthal. Formó parte del equipo fundador de Sala CERO.


Ha sido seleccionada en numerosos concursos y curadurías, participando de varias de Ferias de Arte Contemporáneo alrededor del mundo y de exposiciones individuales y colectivas en Chile, Estados Unidos (New York y Miami), Hong Kong, Francia, Argentina, Panamá, Canadá, México, Bolivia, Corea del Sur y España, entre otros.


Su trabajo se inspira en sus propias experiencias de vida, que giran en torno a temas identificables como el amor y las relaciones, el dolor y el sufrimiento, las necesidades y los deseos básicos. Lo que hace que su trabajo se destaque es la forma en que los representa: usando fotomontaje digital y mucha creatividad, junta diferentes texturas y objetos, tanto reales como artificiales, y a veces en proporciones desproporcionadas. A veces puede incorporar elementos poéticos y el concepto de iluminación de pinturas barrocas de antiguos maestros, así como extraer referencias de la historia colonial de Chile, la cultura aborigen o motivos religiosos claramente identificables cuando se visita el Museo Nacional de Bellas Artes de Chile en Santiago.


Los montajes fotográficos y digitales de la obra de Margarita Dittborn han sido descritos como paisajes oníricos y universos en sí mismos. Los tres elementos que son evidentes en la mayoría de sus imágenes son alimentos, animales y mujeres que representan una variedad de personajes históricos.

Su trabajo es una representación de sus propias interpretaciones de estos temas y el resultado de su autocrítica. Su proceso de creación es tanto un medio de sanación, como una forma de documentar hitos existenciales, con una estética profundamente personal.

bottom of page